No me convence el acelere de la vida actual, cada día entiendo más que las mejores cosas se logran con el tiempo y que del afán no queda sino el cansancio. Hace poco estaba leyendo un artículo en el periódico sobre un tipo que escribió un libro en el que aboga por poner menos presión a los niños en su crianza, y vi que también escribió un libro que entra en la literatura slow. La verdad ya antes había escuchado del movimiento, pero no le había parado muchas bolas.
Los sitios que he encontrado del movimiento, hablan de tomarse la vida con calma sin afanarse tanto por hacer muchas cosas en menos tiempo; también de destinar el tiempo suficiente para descansar. El movimiento no promueve la pereza ni el no hacer nada, sencillamente defiende que hay momentos para cada cosa y que no se debe ser esclavo del trabajo.
Personalmente creo que la gente debe entender que las cosas toman su tiempo y tener paciencia, relajarse, tomarse la vida con más calma. Por ejemplo en las calles el tráfico es imposible en buena parte por ese afán que tiene la gente de llegar primero, si fuéramos más respetuosos de las normas y del sentido común, y andáramos con más calma seguramente todos llegaríamos más rápido.
En la vida laboral el afán me cansa, si corriéramos menos, pensáramos más y fuéramos más organizados tendríamos un mejor ambiente, con mucho menos estrés y seguro que hasta tendríamos que trabajar menos horas. Se han puesto a pensar cuánto tiempo se pierde por querer arrancar como locos a cumplir una tarea, sin antes haberla definido bien o analizado como realizarla. Corremos para un lado, luego para el otro, si supiéramos a donde vamos, no tocaría correr tanto.
Ir lento, no significa que no se vaya a llegar, sencillamente ir a otro ritmo, que a veces puede incluso ser más rápido que correr; recuerden la fábula de la liebre y la tortuga.
Para finalizar dejo una serie de links sobre el movimiento slow, por si alguien está interesado:
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